Los ruidos de este momento

Por
Un bebé que llora fuerte, un cachorro que ladra suave, una máquina excavadora que pica y pica en la calle. El ventilador del ordenador en un suspiro interminable se combina con el tic-tac del reloj de la cocina y, si presto atención suficiente, hasta el ruidito de la nevera, silenciado por la monotonía, se manifiesta a lo lejos. Un mensaje que llega al teléfono, una puerta que se abre, una moto que tiene prisa por pasar debajo de mi balcón. Ahora un coche. Otro más ruidoso. Y el campanario avisa que son las once, hora en que debo abandonar mi puesto para ocuparme de otros menesteres. Con el ruido del teclado que escribe esta frase, voy dejando la escritura hasta luego.

Comentaris

Publica un comentari a l'entrada

Entrades populars d'aquest blog

De nuevo morí en el intento

Por
Imatge
De nuevo morí en el intento. En el intento de amar, de abrirme al amor. Me esforcé y perecí. Sí, creo que fué el esfuerzo para ser amado. Y para ser amado dejé de ser yo, para convertirme en un yo ideal(izado). Me dije casi sin darme cuenta que lo que sentía no era válido, que debo adaptarme al deseo del otro hasta perderme en él. Y confieso que comportarme así, en tiempos pasados dió sus frutos. Frutos en forma de placer, de risas y de entretenimiento con poca profundidad. Ahora mi sentir profundo pide paso a relaciones más honestas, menos perfectas. Dónde puedo ser infantil, ansioso, sensible. Dónde puedo sentirme perdido, vulnerable y sin tener la respuesta a cada situación. Con mis luces y con mis sombras caminar de la mano con la persona amada. Y las risas tienen donde anclarse, el entretenimiento está acorde a una complicidad. Esas cosas, esas pequeñas cosas que nos hacen tan grandes, como amadores, amantes y personas. Sigo tratando de saber que es ser un ser humano. Gracias VID
Més informació

Nadie sabe lo que es la vida o vivir

Por
Imatge
Nadie sabe lo que es la vida o vivir pero todo el que recorre el camino, la reconoce. Ser ignorante significa tener prisa para rellenar codiciosamente, arrogantemente, ignorantemente su conciencia-forma de previsiones supuestamente felices, de sueños. Sufrimos porque somos ilusos. Nos apegamos a nuestros sueños, porque son nuestros, aunque antes han sido de otros a quienes no hemos preguntado y a quienes tampoco haríamos caso porque creemos nuestro caso diferente. Confundimos sueños con realidad como cuando estamos dormidos. Proyectamos la vida como si fuera una película sembrada de nuestras preferencias: narcisismo, egocentrismo, egolatría, arrogancia, importancia personal, cualidades imaginadas de éxito juvenil. No entendemos ni la cosa más simple profundamente, en sus múltiples relaciones, como una simple hierba las establece con el cielo y la tierra. Sin embargo ¿hay algo en nosotros que capta en el Cosmos la máxima sabiduría que es? Extraido de PRÓLOGO PARA OCCIDENTALES realizado
Més informació

El sonreir invernal

Por
Imatge
Y levantar los brazos y agradecer por un momento que está nevando, o que ha nevado. Como si el júbilo primaveral se asomara en el más meridiano invierno. Como la vida misma, cuando creemos que estamos en nuestro particular invierno y, por aquellas casualidades (o causalidades sincrónicas), se nos dispara una sonrisa que no encaja en esa época emocional se supone más regia, más solemne e institucionalizada por la razón y el contenerse. Y va, y sale! esa sonrisilla delatadora se abre paso hacia una superficie que parecía estar más lejos y menos disponible hace tan sólo unos segundos. Los brazos se levantan, reivindicando su lugar hacia lo alto, el pecho se expande y la sonrisa deja de ser una insinuación para convertirse en una expresión global de gratitud y entrega.  La primavera como semilla guardada en el interior del invierno.
Més informació